sábado, 18 de junio de 2016

COMENTARIOS ELEISON - LA ARGUCIA DEL "ANTI-SEMITISMO"




Número CDLXVI (466)
18 de junio de 2016

La Argucia del “Anti-Semitismo”

Mons. Williamson




¿Es “antisemita” esgrimida como una espada?
Sólo pidan a quien la esgrime definir la palabra.

Hay palabras engañosas que parecen significar una cosa y son empleadas para significar otra bien distinta. Una de esas palabras más engañosas de todas es “anti-semitismo”. La palabra parece significar oposición a todos los Judíos simple y puramente porque son Judíos y, en este sentido, esta palabra condena correctamente algo malo porque algunos Judíos son malvados pero ciertamente no todos. Por otro lado, es a menudo utilizada para condenar absolutamente toda oposición a cualquier cosa que cualquier Judío hace, y entonces la palabra está erróneamente condenando algo bueno, porque siempre que los Judíos hacen cualquier cosa mala, entonces la oposición a ellos es buena. Pero, ¿hacen los Judíos cosas malas? Obviamente. Ellos crearon el Islam para los Árabes, la Masonería para los Gentiles, y el Comunismo para el mundo moderno, todos estos con el fin principal de luchar contra Jesucristo y el Cristianismo, y así enviar almas al Infierno.

Un libro que todos los Católicos deben leer, quienes desean defender a la Iglesia contra el Islam, la Masonería y el Comunismo, ahora Globalismo, es Complot Contra la Iglesia por Maurice Pinay. El libro fue escrito justo antes del Vaticano II para ser puesto en las manos de todos los Padres Conciliares con el fin de advertirles del gran peligro en el cual la Iglesia se encontraría en el Concilio. Efectivamente. Los Padres del Concilio terminaron alabando al Islam (Unitatis Redintegratio), adoptando principios Masónicos (Dignitatis Humanae) y no mencionaron, mucho menos condenaron, al perverso sistema del Comunismo. He aquí cómo en su Capítulo sobre “Antisemitismo y Cristianismo”, Maurice Pinay analiza la traición de la palabra “antisemitismo”:

A través de los siglos, los Judíos siempre han usado palabras vagas con una variedad de significados, escribe Pinay, para embaucar las mentes de los Gentiles y así impedirles defenderse a sí mismos contra el empuje Judío hacia la dominación mundial en esta guerra de 2.000 años contra el Cristianismo que Pinay cuidadosamente documenta a lo largo de su libro. Entonces en una primera etapa, por medio de tres argumentos, ellos buscan prevalecer sobre los líderes Gentiles para que condenen al “antisemitismo” en el primer sentido mencionado arriba, el de oposición a toda cosa y toda persona Judía: en primer lugar, Cristo, estableciendo la igualdad de todos los hombres ante Dios, condenó toda degradación de una raza entera; en segundo lugar, Cristo le dijo a todos los hombres que “se amen unos a otros”; en tercer lugar, ambos, Cristo y Su Madre, eran Judíos.


Pero en una segunda etapa, los Judíos, una vez que hubieron obtenido de los Gentiles la condenación de un “antisemitismo” vago, proceden a darle a la palabra un significado bien diferente, el segundo sentido mencionado arriba, el de oposición a cualquier cosa que los Judíos hacen. Así, los “antisemitas” son: todos los patriotas que ejercen su derecho de auto-defensa contra la subversión Judía en su país; todos los defensores de la familia contra los errores y vicios de toda índole fomentados por los Judíos para disolverla (ejemplo pornografía, aborto); todos los Católicos que defienden su santa religión contra toda forma de corrupción abierta o secretamente promovida por los Judíos para socavarla; todos los que dicen la verdad desenmascarando a los Judíos como los originadores de la Masonería y el Comunismo (ahora del Globalismo y feminismo, etc.); y todas las personas en general que se oponen a la subversión Judía de la Iglesia y de la civilización Cristiana. Y por su control de la política, finanzas, cine y sobre todo por sus medios de comunicación, los Judíos han logrado darle tanta carga eléctrica a esta pequeña palabra “anti-semita” que es suficiente para electrocutar a cualquiera que la toque.

Pero, ¿quién es lo suficientemente tonto como para haberles permitido controlar la política y finanzas? ¿Quién les ha permitido monopolizar prácticamente la industria del cine y los medios de comunicación? ¿Quién piensa que es muy inteligente el acabar con toda la censura y ahora está cooperando con ellos habilitándolos para que censuren el Internet? En cada caso, son los gentiles liberales, que por lo tanto están siendo esclavizados minuto a minuto en su Nuevo Orden Mundial. Doctor, ¡cúrate a ti mismo! Pues quien lee sus diarios o mira sus programas de televisión, ¿tiene otro a quien culpar más que a sí mismo por dejar que ellos tomen el control de su mente, y de su civilización?

Católicos, lean Complot Contra la Iglesia. Si alguien los está acusando de ser un “antisemita”, es muy posible que tengan razón de estar orgullosos.

Kyrie eleison.