domingo, 17 de enero de 2016

LA “MISERICORDINA” DE BERGOGLIO




Ahora, los confesionarios están vacíos gracias a Francisco y al Año de la Misericordia. Cada vez hay menos penitentes y cada vez menos arrepentidos. Los contraproducentes efectos de una “puerta” demasiado abierta.

NOTA SYLLABUS: ¿No será que se fueron todos a confesarse con los sacerdotes de la Neo-FSSPX, que ahora tienen el plácet de Francisco?