lunes, 6 de mayo de 2013

EL HOMBRE AMBIGUO





Un perro de caza, que había atrapado a una liebre, ora la mordía, ora le lamía los morros. Ésta, cansada, le dijo: “pero bueno, deja de morderme o de besarme, para saber si eres mi enemigo o mi amigo”.

La fábula es apropiada para el hombre ambiguo.

Esopo. “El perro y la liebre”.